Adiós a nuestra Balaustrada

Si nadie lo remedia este próximo lunes comenzarán las obras en la calle Padre Luis y que llevan aparejadas el derribo de la Balaustrada que da acceso a la Plaza de la Leña en un lateral del Museo Provincial. La idea es suprimir la balaustrada existente en la zona y sustituir las escaleras por una rampa. Una actuación que cuenta con el rechazo frontal del PP. La obra fue adjudicada en más de 280.000 euros a la empresa Eduardo Boán.

Según indicó ayer el concejal responsable de obras en el centro urbano, Demetrio Gómez Junquerase, se pretende recuperar las cotas originales de la calle, que fue sometida a un relleno en los años 50. La recuperación de su nivel original en la zona pegada al edificio del Museo es la actuación que permitirá suprimir la balaustrada y las escalinatas que dan acceso a la plaza de A Leña y sustituirlas por una rampa.


Rinconcitos con historia que van despareciendo de nuestra ciudad. Está pendiente un estudio arqueológico y les da igual. Pese a todas las quejas recibidas de vecinos, asociaciones y partidos políticos Mosquera sigue adelante con su proyecto sin modificar un ápice su propuesta inicial, al igual que hizo en la monstruosa Plaza de Cocepción Arenal, en donde aún estoy esperando la inauguración por parte del Ayuntamiento.
Lo más insólito de todo es que esta pieza fue adquirida en su día por Castelao que la salvó de su destrucción en 1929 cuando se derribó el Pazo de San Román cediéndola posteriormente para su ubicación en ese lugar.

1 comentarios:

Sísar dijo...

Fernández dice que él y Pedrosa se encadenarán a la balaustrada del Museo.
El viceportavoz municipal del PP, José Manuel Fernández, aseguró ayer en Radio Voz que a partir del próximo lunes, en que está previsto que comiencen las obras de reforma de la calle Padre Luis, tanto el como la concejala Teresa Pedrosa se encadenarán a la balaustrada del Museo, que el BNG pretende retirar en esta remodelación.
«Claro que lo vamos a hacer -aseguró el popular-. Nos van a tener que sacar de allí. Creemos que hay que poner un poco de sentido común a todas estas obras que están dejando a las plazas de Pontevedra sin su fisonomía propia».
El concejal reiteró que el gobierno local está «uniformizando» las plazas de la ciudad, «y esta prácticamente es la última». «Pensábamos que como era la plaza de la Leña, que es única, como reflejan las guías turísticas, no la iban a tocar», dijo Fernández, que recordó que la barandilla «separa la Pontevedra antigua y moderna».