Dulces sueños...

Nuestro amigo Phil duerme plácidamente en su coche un domingo por la mañana cualquiera. Desde que el Ayuntamiento retira bancos para poner bolardos, Phil no encuentra donde dormir y ha optado por aparcar su coche en el centro de Pontevedra. Para ello aprovecha los estacionamientos de carga y descarga que durante el fin de semana se pueden utilizar (sino sería imposible). Felices sueños...

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Le falta al copiloto mochuelo para alludarle en el sueño y en el despertar, poteando, hijos de puta como me poteis en mi calle os rillo jejejejeejej besos parace un cachito de pan.

Anónimo dijo...

vaya angelito....jajaja. Hasta parece buen chaval,¿eh?. un saludo de zarko

Anónimo dijo...

Eso es un mito lolailo y fue le hamburguesa que me sentó mal.

Anónimo dijo...

fue una corriente que te corto la digestion jajajaja

Sísar dijo...

Dopazo siempre buscando las cosquillas eh? Eso concierne a mí y a Phil, no? Pues eso.
No obstante no se preocupe por usted ya que sabe que siempre le pediré permiso aunque la foto tuya en Carabás la publico aunque acabe en los juzgados porque eso forma parte de las anales de la historia de la noche pontevedresa jejeje