Llevo varios días observando el conflicto entre los operarios del parque de bomberos de Pontevedra y el Concello de Pontevedra, con Guillerme Vázquez al frente. Desde la distancia se torna difícil poder una valoración de la misma pero en lo que sí no estoy de acuerdo es en la forma de responder ante sus reclamaciones a un colectivo tan vital en una urbe. Los bomberos no son un ente cualquiera y merecen ser recibidos por el Alcalde, sea cual sea la cuestión que se debata.
Y es que hoy una noticia me ha recordado tiempos pasados, cuando Guillerme se plantaba ante la negociación colectiva con los empleados del Concello, cuando en la anterior legislatura ocupaba la responsabilidad del área de personal, ahora en manos de García Lores. El Juzgado de los Social número 3 acaba de anular varios artículos del convenio colectivo del personal del Concello de Pontevedra que excluían a los trabajadores municipales con contrato inferior a un año disfrutar de diversos beneficios sociales comunes al resto de la plantilla.
Hasta ahora, los cerca de setenta empleados temporales que contrata el Ayuntamiento cada año, carecían de ayudas a prótesis y estudios, asesoramiento jurídico, asistencia médica privada o gastos de sepelio; ventajas que disfrutaban el resto de trabajadores del Concello.
A esta sentencia sentencia hay que añadir otra más que anuló la sanción impuesta de suspensión de empleo y sueldo por seis meses a una agente de la Policía Local a pesar de que la sanción fue revocada por la autoridad judicial “basándose en que no se respetó el principio de presunción de inocencia y no se aportaron, por parte de la Administración, pruebas de cargo suficientes”.
¿Cómo se llama a esta forma de gobernar? ¿de izquierdas, discrimando a trabajadores? La política local para los gestores.
3 comentarios:
Especialmente, tras tener tener un trato directo con Guillerme Vázquez pensé que su vocación política era verdaderamente de izquierdas, pero la realidad es bastante distinta.
Un Gobierno que fomenta la precariedad laboral y lo hecho a esta agente de la policía es tristísimo.
Conozco a una activa del cuerpo de seguridad municipal que fue sancionada por no acudir a trabajar por tener que llevar a su madre a urgencias... ¿cómo se le llama a esto también?
La protesta de los bomberos es patética. No he oído ni un solo argumento decente. Que son pocos, que tienen pocos medios.
Pues bien, tienen más gente que nunca y más medios que nunca. ¿Que no es suficiente? Nunca es suficiente, es obvio que todo es mejorable: la plantilla de la Policía Local, de los bomberos, de los inspectores de Trabajo...
A mí me parece una protesta más política que laboral.
Y en cuanto a la sentencia, hoy explica muy bien el concejal de Personal, García Lores, lo ridículo que es pagar prótesis, gafas y anticipos a trabajadores que entran para uno, dos o tres meses. La sentencia aborda temos muy concretos y limitados, como ves. Además, la sentencia no es firme.
Todavía no pero la sentencia en contra la suspensión de empleo y sueldo a la policía local sí. Ese argumento dado por García Lores es muy bajo y pone al trabajador en situación de muy poca consideración. ¿qué les está llamando? Ojo porque estas declaraciones no ayudan en nada en un clima de futura negociación laboral.
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