La diferencia entre Ser y Estar

Sergio Cortés es el socio de Marc Vidal en la empresa CINK, un servicio de agitación 2.0 para empresas y administraciones públicas.
Leyendo su blog os extraigo el legado digital que ha dejado para sus lectores:

La diferencia entre ser y estar es: que en la red se está, en el mundo real, se es.

Quiero ser en todo lo que a mi respecta: mi felicidad, mi deshonestidad, mis principios y mis debilidades consentidas. Quiero estar en todo lo que está pasando, en esta mundosfera, estar en la memoria colectiva, infinita y de por vida de Google y las razones observadas de mi Facebook.
A los míos les quiero dejar mi testamento digital de estar y mis sentimientos emocionales de haber sido.
A veces pienso más en estar que en ser. Pero es sólo un espejismo, nací para ser y moriré para estar. Esta es la nueva realidad de la conciencia eterna de Internet.
El que firma, afirma haber analizado todo lo dicho en este legado. Afirma tener toda la diferencia entre lo que vamos a dejar y lo que vamos a olvidar.
Si aquí me lees, tú el que sabe mi nombre y vive en el año 2080, cuando yo no esté y tu seas mi nieto, recuerda que aquí pensé en ti, como acto de ser y no como mero hecho de estar

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que movida lo de los aviones a guantánamo, eh?
ese pp que tanto lucha por los derchos humanos y la LIBERTAD!!

Anónimo dijo...

El País censura una carta que desmiente las informaciones sobre Aznar

PD).- Se niegan a publicar la carta. El diario El País se negó este miércoles, 3 de diciembre, a publicar la carta que el secretario general de FAES, Jaime García-Legaz, dirigió al director de este periódico en la que se denuncia "la manipulación informativa ejercida por El País sobre los vuelos de la CIA".

En aras de la libertad de expresión, se reproduce íntegramente la carta al director que El País no ha querido publicar:

Madrid, 3 de diciembre de 2008

Sr. director:

Ante la información publicada los días 30 de noviembre y 1, 2 y 3 de diciembre de 2008 por El País, relativa a don José María Aznar, bajo el epígrafe “Guerra sucia contra el terrorismo”, le comunico lo siguiente:

-Los titulares “Un informe secreto revela la connivencia de Aznar con los vuelos a Guantánamo”, “Aznar buscó aeropuertos discretos para vuelos de presos a Guantánamo” y “El Gobierno, el Congreso y la Audiencia investigan el pacto secreto Aznar-Bush” son sencilla y llanamente falsos, como se desprende de la información publicada, que hace referencia a documentos sobre reuniones entre funcionarios españoles y estadounidenses en el marco del Convenio de Cooperación para la Defensa suscrito entre España y los EE.UU. Ninguno de los documentos acredita el supuesto “pacto secreto” entre el Sr. Aznar y el Sr. Bush, porque dicho acuerdo, simplemente, nunca existió. Es sólo una falsedad fabricada por el diario El País. Sólo una mayúscula falta de respeto a la ética y profesionalidad periodística lleva a titular de ese modo la información publicada.

-El Ministerio de Defensa ha desmentido la información publicada por El País, afirmando oficialmente que “las autoridades de EE.UU han confirmado por escrito que todos estos vuelos cumplían lo previsto en el art. 25.2 del Convenio de Cooperación para la Defensa, es decir, que no transportaban pasajeros ni carga que pudiesen ser controvertidos para España” y asimismo que “el Ministerio de Defensa no tiene constancia de ningún vuelo o escala en territorio español por parte de aeronaves de las Fuerzas de los Estados Unidos de naturaleza ilegal, o que de algún modo hubiera podido contravenir los acuerdos internacionales suscritos por España en esta materia”.

-El amarillismo en el que incurre El País no es nuevo. En septiembre de 2004, en uno de sus editoriales, El País llegó a afirmar: “Hay una inquietante similitud entre Aznar y Bin Laden”. El País establece así similitudes entre una víctima del terrorismo y un terrorista. Esto sí que resulta realmente inquietante.

-Como bien saben los ciudadanos españoles, la única guerra sucia contra el terrorismo que ha existido en España es la que tuvo lugar durante la etapa del gobierno socialista que precedió a la del gobierno presidido por D. José María Aznar.

Atentamente,

Jaime García-Legaz,

Secretario general de la Fundación FAES