¿Descentralización?

Siempre se ha dicho que la descentralización es beneficiosa para el ciudadano, ya que se le puede servir mejor desde una mayor cercanía.

Es un concepto con el que nunca he estado de acuerdo y que me parece una manera de aumentar gasto público inutilmente. Hay varios estudios que mencionan que sin tanta descentralización en España se podría ofrecer un mejor servicio al ciudadano y con sólo 700.000 funcionarios en vez de los más de 2 millones que hay actualmente. Esto es debido al ahorro en procesos y costes derivados del desplazamiento y de una economía de escala.

En materia económica el concepto está muy claro y ahora no me pondré a buscar fuentes. Lo que pretendo con este post es reseñar como este concepto se usa políticamente en pro de los intereses de una causa.

En Galicia estamos pidiendo más transferencias del Estado porque así redundará en beneficio del ciudadano. Pero este mensaje desaparece cuando es la propia Galicia la que tiene que descentralizar. A revés, ella centraliza y busca centralizar todo en torno a ella.

Primero se quiso suprimir las Diputaciones porque están caducas, y la verdad es que algo sí que lo están pero de ahí a suprimirlas hay un mundo. Lo que hay que hacer es actualizarlas al siglo XXI y reformarlas, pero su función es muy importante en el reparto de recursosa todos los concellos. Pero en vez de ello se le busca quitar competencias sin ningún patrón establecido. Por poner un ejemplo: ¿Quién me justifica a mí que el Príncipe Felipe va a estar mejor gestionado desde Santiago que desde Pontevedra? Económicamente si se gestionasen todas desde Santiago se produciría un ahorro para las arcas públicas, pero socialmente esto choca radicalmente con el discurso que mencionaba arriba.


Después se han creado unos 15 organismos autómicos a mayores aumento el gasto público al menos en un 35% más. De nuevo no hay patrón ni guía en esta nueva centralización a la gallega.

Lo que se pretende es construir más Galicia, como reza el eslogan del BNG y todas las medidas giran en torno a eso. En una sociedad cada vez más global, donde se transfieren competencias a la U.E. y se busca la internacionalización de derechos y obligaciones, en dónde todo el mundo pueda gozar de las mismas oportunidades, con un fuerte concepto de solidaridad, esto me parece una enorme involución que se disfraza bajo el nombre de Descentralización.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La descentralización fue una buena idea al principio, cuando se planteó dar ciertas competencias a las comunidades para dotarlas de cierta autonomía.

El problema ha venido cuando se han comenzado a dar competencias que claramente deberían estar centralizadas. Por ejemplo cuestiones como la seguridad, la sanidad, la gestión de impuestos y en un futuro veremos hasta como se entrega el sistema de pensiones.

Se da la paradoja de que dado el camino que llevamos en un futuro las cotizaciones a la seguridad social, las exenciones fiscales a las empresas o los impuestos a las personas podrían ser diferentes según la CCAA.

La pregunta es ¿qué sentido tiene? Hoy por hoy nos encontramos en un proceso de descentralización absoluto, donde si yo me pongo en enfermo en Galicia y soy de Asturias, los médicos no van a poder acceder a mi historial. Pero al final es una mera cuestión económica, si las comunidades asumen competencias tienen que crear empleo en su comunidad, y además empleo público. La creación de puestos de funcionario, es el pan+circo del siglo XXI. En un país donde no hay industria y el empleo es precario, la posibilidad de obtener un puesto en tu propia provincia es el sueño de mucha gente.

Sísar dijo...

Eso es lo más preocupante, que uno por vivir en Andalucía tenga más privilegios que otro ciudadano de Castilla por ejemplo.

La solidaridad interterritorial es básica y necesaria y nadie lo discute excepto unos pocos nacionalistas cegatos. En la U.E. es uno de sus principios porque una desigualdad económica provoca flujos hacia esas zonas y aprovechamiento del grande sobre el pequeño.

Pero yo aquí lo que pretendo es dar a conocer la estrategia llevada a cabo por la actual Xunta de Galicia, que bajo la palabra Descentralización, popularmente muy aceptada, está intentando crear una Galicia centralizada bajo el mando de unos pocos.

Anónimo dijo...

Buen análisis.
Hay que ir marcando pautas.
Es meramente un problema creado por los nacionalismo, un problema metafísico sobre qué queremos y a dónde pretendemos ir a parar.

Creo en una Galicia fuerte pero dentro de una España fuerte.