La verdadera historia del Loro Ravachol

Dicen que es el santo pagano de Pontevedra, uno de los emblemas y símbolos más reconocidos de nuestra ciudad.
La Corporación Local de Pontevedra en este 2.011 decidió trasladar su entierro del arraigado Viernes de Ravachol a sábado con el objetivo de dinamizar los carnavales de la capital. Este hecho fue el germen de que quisiera saber e investigar por mí mismo la fecha de su muerte y qué día de la semana se le dio santa sepultura.

Muchos medios han venido recogiendo e informando año tras año que la muerte del loro Ravachol ocurrió un lunes de Carnaval. Páginas oficiales como
Visit-Pontevedra o Turismo Rías Baixas lo recogen así en sus textos extendiéndose esta teoría entre la creencia popular.

Lo único cierto que existe sobre el lunes es que ése fue el día que el Diaro de Pontevedra y La Correspondencia Gallega se hicieron eco del fallecimiento del loro, 27 de Enero de 1.913. Su muerte debió producirse entre el 24 y 26 de Enero (como muy bien apuntó Manuel Jabois en un
artículo del Diario). Los carnavales ese año se producirían todavía a la semana siguiente, por lo que además también es equívoco señalar su fallecimiento dentro de la semana de los carnavales.

La ausencia de actividades en la ciudad unido al carácter alegre y festivo de don Perfecto Feijóo y sus amigos hicieron posible uno de los mayores eventos de ese año en la ciudad.

El cádaver del loro fue embalsamado y colocado en una mesa de flores en la famosa farmacia de la época el lunes 27 de Enero de 1.913.


    Vecinos de toda Pontevedra acuden a despedirlo y mostrarle el pésame a don Perfecto. Abrumados por la cantidad de gente que asiste al velatorio, el presidente del Recreo de Artesanos, Isidro Buceta, prepara una reunión para analizar la organización de un acto en la que pueda participar toda la ciudadanía.

    De esta manera y con la inminente llegada de los Carnavales a la ciudad, la Sociedad de Artesanos se hace cargo del cuerpo del loro el domingo de Carnaval, 2 de Febrero de 1.913, en donde instalan una capilla ardiente por la que acuden autoridades civiles y militares. Se programa su entierro para el Miércoles de Ceniza, 5 de Febrero de 1.913.



    El Miércoles de Ceniza, a las 19:00 horas, parte la comitiva fúnebre desde el local de artesanos (situado en la Plaza de la Herrería) pasando por Soportales, Fernández Villaverde, Michelena, Oliva y Riestra, para finalizar en los jardines de Eduardo Vincenti, en donde se ubicaba el
    Circo-Teatro (una edificicación de madera que fue el principal centro de ocio y cultural de la ciudad a principios de siglo).


    La comitiva estaba encabezada por doce jinetes con faroles encendidos y desfilaron en ella, además de ciudadanos con máscaras, cuánta banda existía en la ciudad: bandas de cornetas, la comparsa Los Espías, las carrozas del Liceo Casino y del Recreo de Artesanos, la de los contertulios de la botica, la banda de música municipal...

    En el Circo-Teatro se celebra una velada con las siguientes intervenciones:

    • Interpretación de un Introito, por la Banda Municipal


    • Latomanía biográfica con los excesos consiguientes, por un entusiasta admirador del ilustre muerto


    • Canzzonetta coreada, por el Signore Victorio


    • Herejía lírica recitada por la Signorina Biancha della Porta


    • Discurso tétrico necrológico, por un Jefe de Estación (que es de los que mejor conocen lo deprisa que marchan las cosas de este mundo)


    • Gran marcha macabra triunfal, coreográfica y apoteosis.

    Terminada la velada se da traslado al cuerpo fúnebre a la finca que don Perfecto posee en Mourente, O Padronelo, en donde se le entierra.

    Años más tarde sería una peña taurina, los Karepas, los que devolvieron los carnavales a esta ciudad. Eran entre 100 y 150 peñistas unidos entorno a la discoteca Shiva los que organizaron un carnaval en pleno mes de Agosto (1981, 1982 y 1983) con la idea de atraer a los veraneantes de Sanxenxo.

    A raíz del trágico incendio de la discoteca Alcalá 20 en Madrid, el 17 de diciembre de 1.983, que generó una desconfianza enorme hacia el sector, los hosteleros de Pontevedra deciden unirse y crean una Comisión Coordinadora de Sociedades y Discotecas para velar por sus intereses.

    De esa Comisión parte la idea de organizar unos Carnavales al estilo Shiva con el objetivo de atraer a gente de toda Galicia. Se recurren a los organizadores de la Semana Santa y numerosos pontevedreses colaboran en ese primer desfile del año 1.984.

    Al año siguiente Pepe Shiva leyendo el libro de Prudencio Landín, Mi viejo carnet, se le ocurre revivir el divertido episodio de la muerte del loro Ravachol. Lo sitúan un viernes para favorecer al negocio hostelero.

    6 comentarios:

    SL dijo...

    Gran recopilatorio Cesar. En esta ausencia que hice por un largo tiempo, estuve viendo en la sombra blogs que florecían como vellapontevedra o follasverdesconpontevedra, que no dejan de echar una mirada al pasado y hacen que se incremente mi interés particular acompañado claro de los posts de Don Filiberto. Me ha encantado el articulo y tenía que decirlo

    Sísar dijo...

    Gracias SL. Es un precioso regalo el que nos hacen los autores de los blogs VellaPontevedra y FollasVerdes.

    Un saludo

    SoyDePontevedra dijo...

    Que gran historia.

    Brugal con Cola dijo...

    De vez en cuando echo una ojeada a este tipo de post y a blogs como los que comentas y me vuelven las ganas de retomar el blog jej

    Muy buen relato.

    Un saludo y sigue escribiendo!

    Sísar dijo...

    No sé a qué esperas Brugal!!

    Un saludo

    Brugal con Cola dijo...

    Me gusta hacer las cosas bien y ahora mismo no tengo el tiempo suficiente para escribir y llevar yo solo un blog diario, que es lo que me gustaría.

    Épocas de la vida supongo.

    Un abrazo y sigue así.