Estoy por asegurar, casi al 100%, que una de las causas del secado de los cipreses casalianos plantados en el entorno del Teatro Principal fue la instalación de unas luces halógenas directamente en la base del árbol.La foto que podéis ver a la derecha fue tomada antes de la retirada de estos tres ejemplares (aquí se observa que no han sufrido vandalismo).
Invito a quien desee probar a qué se atreva a poner las manos encima de los focos y sienta la enorme temperatura que desprenden esos focos en la raiz. Yo aguanté como mucho dos segundos.
Un árbol con esa temperatura e iluminación nocturna es imposible que realice el proceso de la fotosíntesis necesario para su vida.
Y ayer paseando por las obras de la Alameda (esas que afirmó Teresa Casal que terminarían el 31 de Diciembre, excepto la rehabilitación de los famosos azulejos de Carlos Sobrino) me encontré con varios árboles como éste de la foto.
Y he traído este debate hasta aquí porque espero que haya un buen estudio biológico sobre la afectación que estos focos pueden causar en unos árboles (muchos de ellos centenarios) que forman parte del patrimonio de todos los pontevedreses.
Los precedentes de estos chapuzas, que ahora han encontrado una nueva adicción en la iluminación arbórea urbana, me hacen temer lo peor.
2 comentarios:
Ese tipo de iluminación é, ademais de contaminante, un acto de puro vandalismo.
Ó Concello dos Camaradas vaille esa forma de actuar.
La iluminacion Halógena no afecta para nada en el proceso de fotosintesis, para eso hay una luminarias especiales con las cuales puedes cmabiar el ciclo biologico de una planta!!! pero no las alogenas!! Estoy de acuerdo con que la posicion en la que estan colocadas causam mas contaminacion luminica!! en cuanto a la temperatura me gustaria comprobarlo por mi mismo de eso prefiero no hablar pues no lo he comprobado.
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